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viernes, noviembre 04, 2005

Fantasía sobre Pan


El día era radiante y no sólo por que el sol luciera en el cielo, otro motivo hacía que todo fuera alegría y regocijo, Hermes y Dríope esperaban la llegada inminente de su hijo. Todo estaba preparado, la música, el festejo, los invitados ataviados con sus mejores galas, los presentes para la madre y el niño, no faltaba nada si no la llegada de su hijo que no se hizo esperar, pero la alegría pronto cambió a tristeza cuando comprobaron que el ser que había nacido no era precisamente lo que esperaban con tanto anhelo, su cara estaba arrugada y su frente estaba adornada con dos cuernos, su mentón muy pronunciado tenía una especie de barba y aquí no estaba lo peor, de cintura para abajo su aspecto era el de un macho cabrío con patas peludas y provistas de pezuñas.

Su madre comenzó a llorar muy asustada al ver a aquel monstruo al que había dado a luz sintiendo un gran rechazo, entonces Hermes, envolviéndole en una piel de liebre, lo llevó al Olimpo para mostrárselo a los otros dioses. Todos se regocijaron al verlo, por alguna razón para ellos no era un monstruo, si no un ser simpático y ya que todos opinaban así, le pusieron el nombre de Pan que significa todos.

Pan creció y se convirtió en el dios de los bosques y de la brisa del amanecer y del atardecer, tenía dones proféticos, era curandero, cazador y músico, era alegre y le gustaba bailar. Vivía en los bosques en donde correteaba detrás de las ovejas y espantaba a los hombres que osaban penetran en ellos, no así con las ninfas a las que perseguía en cuanto tenía ocasión pues su potencia sexual le hacía estar siempre dispuesto para disfrutar del amor. Le agradaban las fuentes en donde solían jugar las ninfas y en la sobra del bosque, escondido entre la maleza, las espiaba con la esperanza de atrapar a alguna y calmar su deseo. Este divertido personaje, tenía también sus momentos poco amigables, especialmente cuando alguien osaba molestarle durante la siesta, entonces se volvía irascible y no perdonaba al causante de tamaño atrevimiento.

Su gran deseo sexual, le llevaba a veces a tener peleas con otros dioses que tampoco le hacían ascos al tema, como por ejemplo Boreas. Este dios era muy violento, su mal genio era de todos conocido y su deseo desmedido de placer le llevó a ser llamado “el raptor de doncellas”. En una ocasión Pan y Boreas se encapricharon de la ninfa Pitis que al parecer agradecía más los galanteos de Pan lo que provocó que Boreas, movido por los celos, destrozó a golpes el cuerpo de Pitis arrojándola después desde lo alto de una roca para provocar su muerte, pero entonces Gea, personificación de la Tierra, se apiadó de ella transformándola en un pino y desde entonces se dice que cuando sopla Boreas, el árbol gime.

Este triste acontecimiento, no menguó en nada el deseo que sentía Pan por las mujeres hermosas y sedujo a Selene, la luna, a la que regaló un vellocino de gran blancura. Pero quizás el amor más memorable fue el que sintió por Siringa. Era una náyade bellísima que gustaba de cazar y recorrer los bosques para luego retornar al río en donde vivía con sus hermanas. Nada más verla, Pan se enamoró perdidamente de ella y comenzó a perseguirla, pero ella asustada por el horrible aspecto de Pan se dirigió veloz hacia el río pidiendo ayuda a sus hermanas, estas, compadecidas, suplicaron ayuda a Gea que para consternación del dios la convirtió en un manojo de cañas.
Pan al ver lo que había sucedido, frustrado, se arrojó sobre las cañas derramando suspiros de amor, uno de los cuales entró en una caña produciendo un sonido maravilloso. Llevado por la curiosidad, Pan recogió nueve cañas de diferentes longitudes y las ató juntas formando una flauta a la que con su habilidad para la música, logró sacar unas melodías como nunca se había oído hasta entonces.

A partir de aquel día, esa flauta a la que le dio el nombre de siringa, le acompañaría siempre y con ella seguiría recorriendo los bosques en busca de las mujeres hermosas a las que amaría con pasión.

37 Comments:

Blogger Tastavins said...

Me encanta la mitología, y esta es una historia muy chula. Conocía la imagen de Pan, su aspecto y lo de la flauta, pero el por qué y el resto lo desconocía y he disfrutado mucho leyéndolo. Gracias.
Parece que el que la mujer, al ser perseguida por un enamorado al que no corresponde, sea convertida en algo por una diosa o un dios que se apiada de ella es un tema recurrente. A mi siempre me ha gustado mucho la estatua de Apolo y Dafne de Bernini, que refleja el momento en que el dios alcanza a la ninfa y esta se convierte en laurel.
Un abrazo!

noviembre 04, 2005 9:17 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Vaya mala leche convertir a Siringa en un puñado de cañas, estos dioses están locos!! jajaja, aunque parecía que no era un amor correspondido y no tenian mucho futuro, pero en el tema de los sentimientos nunca se sabe, jejeje.

Un beso y buen fin de semana, pásate por casa, hay novedades ;)

noviembre 04, 2005 9:38 a. m.  
Blogger Briseida said...

Era un desasosiego permanente aquello de que los caprichos de los dioses manejaran a su antojo cada situación ¿verdad? :-)
Pero así podemos ahora disfrutar de historias tan fantásticas como ésta.

Besos, Leodegundia

noviembre 04, 2005 9:55 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Ay Leo, pues sí, así fue. Me encantan las historias de la mitología, desde que era niña y mi padre me las leía. Eso de que las mujeres acaben convertidas en elementos de la naturaleza se da con mucha frecuencia. Por un lado es una imagen bonita, pero pobrecillas... Preciosa historia!
Un beso! Buen fin de semana...

noviembre 04, 2005 11:56 a. m.  
Blogger Trini Reina said...

Conocía al dios pan y su flauta, pero no tenía idea de como llegó a él el instumento. Me encanta l amitologia y tu manera de contarla la hace más atractiva aún.

un abrazo y ¡cuidado con pan!:):):)

noviembre 04, 2005 12:26 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Estos caprichos de los seres mitológicos menos mal que se quedan en historias... parece que estuviera permitido todo... ¿tal vez para que luego las gentes no se asustasen tanto ante la realidad?

Un abrazo.

noviembre 04, 2005 1:14 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

Tastavins - Si, imaginación no falta en la mitología y luego como tu dices sirve para que grandes escultores o pintores representen estas leyendas en sus obras hermosísimas como la que tu nombras.

Elen - Jaja, si, pedir ayuda significaba que podías acabar convertida en cualquier cosa.
Gracias por el aviso, ya me pasé por allí.

Almena - Los dioses eran tan caprichosos y retorcidos que más que dioses parecían demonios.

Cris - Bueno, entre ser pino y que Boreas te echara las zarpas encima, creo que es preferible ser pino. ¿no?

Trini - Jaja, tranquila, Pan ni me miraría, no olvides que solo peseguía féminas de gran hermosura.

Brisaenlanoche - Vete tú a saber, pero vivir en aquel mundillo debía de obligarte a tener los nervios de acero.

noviembre 04, 2005 1:40 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Conocia la figura del Dios Pan...pero no su historia,me ha gustado mucho..
Menudo elemento estaba hecho..jajja
Besitos.

noviembre 04, 2005 2:39 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

De sobra esta decir que la mitología me fascina. Yo conocía algo de la historia, desde el cole,cuando estaba en el coro y claro me toco la flauta de pan, así la conocí.

Es un placer recordarla, lo que no sabía era lo de Boreas, solo escuche alguna vez que los arboles gemian con el viento porque tenían miedo(ahroa sé porque!)...y por supuesto que al igual que Pan, a mi si me despiertan durante la siesta....:P

Bikiños!

noviembre 04, 2005 3:16 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Pues mira de lo que me acabo de enterar...no tenia ni idea de donde provenía eso de "la flauta de Pan". Gracias!!!

Estos dioses no eran listos ni nada eh....a dieta sexual no se ponian no. Debia ser para queno les entrara el "apetito"!!!! :P

Musus

noviembre 04, 2005 4:05 p. m.  
Blogger Raúl said...

¡Ah, los dioses grecolatinos! Siempre tan hermosamente humanos. Y es que nosotros siempre ponemos nuestros sueños en las estrellas.
Saludos!

noviembre 04, 2005 5:59 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Leoo, que ya he vuelto!!! y encima vengo aprobada :D

Besitoss

noviembre 04, 2005 6:06 p. m.  
Blogger Turulato said...

Y "siringueiro".., ¿tiene algo que ver con "siringa"?.

noviembre 04, 2005 6:19 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Pues a diferencia de todos los demás, yo conocía muy poquito de esta historia, alguna vez la escuché pero definitivamente no recordaba mucho al respecto, muchas gracias. Hoy he hecho un post que está especialmente dedicado a ti Leo, besos y buen finde!

noviembre 04, 2005 7:41 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Casi no me da tiempo. El menú de abajo me lo imprimo, qué bueno.

Y respecto a Pan, me recuerda a muchos hombres que he conocido. No todos, claro está, pero alguno hay así. Menos mal que éste, al menos, toca un instrumento de viento y nos alegra el corazón. La mitología es fascinante. A mi siempre me ha gustado. Grandes dosis de cultura nos regalas otra vez. Muchas gracias. Besos de Andrea

noviembre 04, 2005 7:53 p. m.  
Blogger Ogigia said...

HOla, Leodegundia...¿sabías que el grito de Pan paralizaba todo de tan tremendo y pavoroso que era?

Me gusta mucho el mito griego

Un saludo,bonita

noviembre 04, 2005 8:03 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

Valentina - Si, Pan se lo pasaba en grande, jaja, tocaba todo lo que podía y no especifico.

Azul - Pues sobre Boreas hay más, era el díos del viento del Norte, se dice que se unió a las yeguas de Erictonio de las que nacieron velocísimos corceles, tan raudos como su padre el viento.

Aitor - No hijo, estaban todo el día practicando, pero de trabajar ni pum.

Raúl - Jaja, creo que ellos soñaban poco, preferían actuar y cuanto más mejor.

Chupituni - Enhorabuena por aprobar, ya creí que habías desaparecido.

Turulato - Si o gaiteiro é quen fae soar a gaita, o siringueiro é quen fae soar a siringa ¿non si?, o que eu non sei é a cal delas.

Diego - ¡Qué sorpresa! pasaré pronto por tu blog, gracias Diego.

Andrea recol - Jaja, si hay muchos que "tocan" todo lo que pueden, pero de música no saben nada.

Ogigia - Pues no, de gritos no sabía nada, así que te agradezco la información que nos das.

noviembre 04, 2005 8:14 p. m.  
Blogger Verso said...

"Pan creció y se convirtió en el dios de los bosques y de la brisa del amanecer y del atardecer, tenía dones proféticos, era curandero, cazador y músico, era alegre y le gustaba bailar.."
Pero sólo veían su feo aspecto exterior, te das cuenta?, seguro que yo haría buenas migas con él, si adoraba la música...
He posteado un pequeño recorrido por la bella Vetusta, lástima que no pude poner más fotos, está preciosa.Besinos.

noviembre 04, 2005 8:21 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

La mitología es puro surrealismo:sueño, alucinación, delirio o azar...o capricho de los dioses.
Es curioso cómo la iconografía cristiana asimila la imagen de Pan para representar al diablo y simbolizar los aspectos más inmorales, perversos y lúbricos del paganismo.
Un deleite que recuperes esta fantasía.
Un abrazo y feliz fin de semana!

noviembre 04, 2005 9:15 p. m.  
Blogger lil said...

Bueno, Leo, no sabes cómo he disfrutado con este relato mitológico.

Me encanta visitarte. Es una sorpresa agradable trás otra...

Muchos besos

noviembre 04, 2005 10:12 p. m.  
Blogger Turulato said...

Eu pensaba a euforbiáceas...

noviembre 04, 2005 11:02 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Es una lástima que actualmente ni interesen mucho a la gentye estas historias tan bonita. No la conocía, gracias por enseñarla.

Besos.

noviembre 04, 2005 11:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Esa historia de los griegos no la conocía, esta muy interesante Leo, te has lucido una vez mas. Decían los griegos que sus dioses los envidiaban por que ellos si eran mortales, cuando leí el título del post creí que ibas a hablar de otro pan, y terminaste con las afamadas flautas de pan que emiten sonidos muy bonitos.

un beso

noviembre 05, 2005 1:31 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Me encanta la mitología y estas historias no las conocía.. así q te lo agradezco... Bueno yo creo q Pan no quería a nadie, solo las deseaba... y creo q entonces como siempre se confundían una cosa con la otra... como dice la película: ¿por qué le llaman amor cuando quieren decir sexo?

noviembre 05, 2005 4:37 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

ninfas perseguidas, gran amante y músico alegre... ¿y el arte de la seducción?
Pan, de todos...

Un abrazo

noviembre 05, 2005 6:11 a. m.  
Blogger Leodegundia said...

Incondicional - Jaja, yo creo que vían algo más que su feo aspecto, por eso corrían, la música no era su única afición.

Marian - La mitología como todo lo demás tiene múltiples interpretaciones y cada uno hace lo que más conviene a sus asuntos, yo prefiero verlo como lo que es, una leyenda entretenida.

Marrakech - Alumno mío, tu "seño" no domina nada, lo que sucede es que es lo suficientemente osada para opinar sobre cualquier cosa y por eso puede que se me pueda decir que soy "la leite".
Y así me gusta, hay que querer a las "seños".

Kuan - Pues yo encantada con que te agrade venir de visita, sabes que tu presencia es apreciada.

Turulato - Pode ser, cada un entende as cousas de unha maneira, e hai moitas maneiras, ¿non é?.

Miguelón - Muchas veces a la gente no le interesan algunas cosas porque no las conoce, por eso es bueno hablar de todo un poco.

Carlos - Jaja, bueno, después de poner recetas de cocina, no me parecía bien hablar del pan, aunque sea muy sabroso.

Natalia - Bueno mujer, el pobre nació con tanta potencia sexual que no podía reprimirse y si además se lo pasaba bien, pues como para dejarlo ¿no?, jajaja.

Marcarlop - Supongo que como siempre andaba "apurado" no perdía el tiempo en florituras.

noviembre 05, 2005 6:51 a. m.  
Blogger Matías Zelick said...

Te tengo que agradecer algo, cuando yo iba en la escuela mis maestros tenían la habilidad de hacer que fuera lo más aburrida posible, pero ahora gracias a ti le voy encontrando un gusto a la historia, a la mitología y a todo lo que nos cuentas. Gracias!

noviembre 05, 2005 4:38 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Como tengo puesto en mi dirección
Darile fantasea, es por esto
por lo que tanto me gustan las historias fantasticas.
Me imagino vagando por los bosques perdida y escuchando las melodicas
notas musicales de entre las cañas.
Un beso y encantada de este pequeño fantástico viaje que me has hecho disfrutar.

noviembre 05, 2005 4:45 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

Matías - Jaja, me alegro de ser una "maestra" amena y divertida, ven a clase cuando quieras.

Darilea - Ten cuidado que en este bosque está Pan que es bastante traviesillo y amigo de correr detrás de las mozas guapas.

Melytta - Gracias por la aclaración, volveré a tu blog.

noviembre 06, 2005 7:08 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

las fábulas de dioses y mitos son realmente fantásticas y a veces crueles pero se les acaba encontrando paralelismo con barbaridades que suceden cerca de nosotros.
Si nos fijamos bien, las mujeres, todavía en gran medida, siguen formando parte sólo del decorado y se les transforma, reúne o elimina a su antojo.
... Y luego decimos: "Qué burradas hacían estos dioses"
Hasta pronto.

noviembre 06, 2005 9:18 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

José - Todas las fábulas, leyendas y mitos tienen siempre algo de verdad, lo que pasa es que se adornan con muchas florituras. Jaja, de todas formas esos dioses eran pelín crueles y caprichosos.

noviembre 06, 2005 9:38 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Una historia bien contada y amena como siempre. ¡Gracias!

noviembre 06, 2005 10:16 p. m.  
Blogger Luis Caboblanco said...

Hola Leo..

Me ha encantado tu fantasia sobre Pan. No puedo decir mucho más.

Un fuerte abrazo..

noviembre 06, 2005 10:38 p. m.  
Blogger Buttercup said...

Qué cuento más bonito!

noviembre 06, 2005 11:04 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

Consumidor irritado - De nada, se hace lo que se puede.

Caboblanco - Con la de cosas que tu sabes, la fantasía podría ser mayor.

Muralla - Jaja, no se me dan bien los idiomas, pero me encanta el gallego y aunque no lo domino lo entiendo bien y tengo libros en esa lengua.

Buttercup - No está mal, saludos.

noviembre 07, 2005 6:34 a. m.  
Blogger Francisco Arsis said...

Curiosa historia la del Dios Pan y Siringa. Me doy cuenta de lo "pez" que estoy con respecto a la mitología, así que no sabes cómo agradezco este tipo de posts. Un fuerte abrazo, Leo :o)javascript:void(0)

octubre 27, 2012 8:27 p. m.  
Blogger Leodegundia said...

Francisco Arsis - A mi me gusta la mitología, como me gustan las leyendas, pues aunque estén llenas de fantasía en el fondo siempre hay muchas enseñanzas.

octubre 28, 2012 7:52 a. m.  

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