Pavos reales

Me entero por el periódico que los primeros pavos reales que llegaron al Campo de San Francisco fueron traídos por un granadino. 

La vida da cien vueltas y a veces el destino nos lleva a donde nunca habíamos pensado llegar y eso le pasó a D. Ramón Alba Fernández de Cañete que nacido en Montefrío (Granada) en mayo de 1919 y que después de aprobar la oposición de registrador de la propiedad, pidió como destino Pola de Lena en Asturias creyendo que no se lo iban a dar, más que eso, al parecer con la esperanza de que no se lo dieran, pero si le adjudicaron la plaza y para el norte se vino supongo que no de muy buena gana ya que eso no era lo que tenía previsto.

Trece años estuvo en Pola de Lena y cuenta que llegó un viernes y como el sábado se celebraba una espicha para allá se lo llevaron y él desconociendo lo que puede lograr la sidra, la bebió como si fuera agua y el resultado fue que tuvieron que llevarlo al hotel a dormir porque no se tenía en pie.

Tuvo otros destinos en Asturias hasta su jubilación, y vive en Oviedo desde 1947, pero la noticia en realidad me llamó la atención porque fue él el que trajo al Campo los primeros pavos reales. Al parecer los tenía en su finca de Granada y parece que le estorbaban allí, así que se los ofreció a Ignacio de Nora, alcalde de Oviedo desde 1951 a 1955, y así llegaron los pavos que según Ramón Alba "los trajo en el tren en primera clase".

A pesar de haber visto a los pavos por el Campo tantas veces, nunca me había preguntado como llegaron hasta allí ya que no son animales autóctonos, por eso cuando lo leí en La Nueva España, periódico que leo todos los días, me pareció curiosa la noticia y quise compartirla con mis lectores.