Libertad de expresión

En estos tiempos que estamos viviendo, la mayoría de la gente se empeña en decir que hay una gran libertad de expresión, lo que no dicen, ni se les pasa por la cabeza, es que esa libertad solo se posee cuando tus opiniones coinciden exactamente con las del que escucha, pues en el momento en que no son coincidentes la libertad se esfuma y se pasa al insulto sin dar tiempo al que habla a explicarse abiertamente.

Hablaremos primero de simples comentarios como estos en los que en realidad no das tu opinión:

Si en un lugar se reúnen varias personas y una de ellas tiene la osadía de decir "otras veinte pateras hoy y quince muertos, ¿es que esto no va a terminar nunca?, inmediatamente alguno de los presentes le recrimina con voz airada "ya empezamos con el racismo".

Otro caso muy común es este: alguien comenta "otra subida en la cesta de la compra ¿a donde vamos a parar con este gobierno?, uff, eso es como tocar un resorte en alguien que pertenezca o sea afín al partido gobernante que inmediatamente responde "claro, siempre quejándose, y el gobierno anterior ¿qué? como perdísteis las elecciones todo son quejas".

Y si hablamos de religión, para que contar, basta con que digas: ¿te enteraste que murió el Papa? para que a continuación el que oye la pregunta te suelta un rollo en el que no faltan palabras como estas: "ese retrógrado que no quiere que se use el condón, que no quiere que las mujeres sean curas.....", claro, los meaaguabendita estáis apenados, pero los progres estamos encantados ya va siendo hora de la la Iglesia cambie......"

¿Y si se toca el deporte?, uno entra en el bar y dice: ¡Hola a todos, menudo gol el del Madrid, eso si es un gol!, ja, no falta algún forofo de otro equipo que salta de la silla a voz en grito para dar una opinión mas o menos como esta "si claro, vosotros siempre compráis al árbitro, no tenéis verguenza...."

En ninguno de los cuatro casos por la frase dicha por el que inicia la conversación se puede asegurar ni que sea racista, ni que sea partidario de la oposición al gobierno, ni que sea persona religiosa ni siquiera que sea socio o simpatizante del Madrid, lo único que sucede es que a pesar de lo que nos gusta vivir en un mundo libre, nos dedicamos a poner barreras a todo aquel que creemos no piensa como nosotros sin tomarnos la molestia de oír sus opiniones juzgando solo por un comentario que en realidad no dice nada de su forma de pensar.

Y esto no es mas que un simulacro de ataque comparado con los que te sueltan cuando das tu opinión a la que tienes tanto derecho como cualquiera en temas como los que hoy en día están en el candelero, véase: bodas homosexuales, asignatura de religión, inmigración, terrorismo, etc. etc. y tu opinión no coincide con lo que ahora se da por llamar "politicamente correcta", entonces los improperios suben de tono y menos guapa te llaman de todo.

¡Que triste que en un país libre no tengas libertad de expresión pues el oponente siempre se siente agredido y reacciona con violencia verbal sin dejarte siquiera exponer los razonamientos en los que basas tu opinión!