Edificios importantes
En todas las ciudades existen algunos edificios dignos de destacar ya sea por su antigüedad o por la historia que se haya desarrollado en ellos. Hoy me gustaría mostraros uno de mi ciudad, sobrio y sencillo pero importante. Me refiero al edificio histórico de la Universidad.

Es un edificio de planta cuadrada cuya fachada está construida con grandes sillares de piedra amarilla

A los lados de la puerta principal hay dos columnas dóricas y dos filas de ventanas y sobre ella una ventana flanqueada por escudos


Las esquinas del edificio están adornadas con un escudo

Unas puertas de madera, de las que podéis ver un detalle, dan paso al atrio

Este espacio consta de dos pisos, el primero adintelado sostenido por columnas toscanas y con arcos de medio punto. El segundo piso, acristalado, se apoya en columnas jónicas. En el centro se encuentra una escultura de Cipriano Folgueras que representa a Fernando Valdés Salas, por cuya disposición testamentaria se construyó esta universidad inaugurada el 21 de Septiembre de 1608, siendo diseñada y construida por los arquitectos Rodrigo Gil de Hontañón y Juan del Ribero Rada.


En una de las esquinas podemos ver la torre, que en 1860 se construyó en sustitución de la espadaña de la capilla. La idea de hacer esta torre se llevó a cabo para hacer allí un observatorio en el que realizar estudios meteorológicos y que se convirtió en el componente más emblemático del edificio. Tiene tres cuerpos, el primero sirve de base, en el segundo podemos ver las campanas originales de 1668 y el tercero estaba destinado a la cámara de observación, por eso dispone de diez ventanales. Hoy en día está vacía. La torre está rematada con una terraza en la que estaban situados los aparatos de medición exterior, hoy ondean allí cuatro banderas, la de España, la de Asturias, la de la Universidad y la de Europa.
Os muestro un dibujo de la Universidad primitiva con la espadaña original y dos fotos, la torre vista desde el atrio y la torre vista desde la calle.



En el segundo cuerpo de la torre hay un reloj cuya esfera es la original de 1668, lo mismo que las campanas, pero la maquinaria fue sustitutita ya en dos ocasiones, una a finales del siglo XIX y la otra después de la Revolución del 34 cuando el edificio fue destruido quedando solo en pié la torre bastante dañada y la estatua del fundador. Pudo ser reconstruido el edificio siguiendo los planos originales, pero lo que no se pudo recuperar fue la biblioteca considerada una de las mejores de España.

Adosado a este edificio está el que fuera Colegio de Recoletas fundado también por Fernando Valdés Salas, obra de Juan del Rivero, cuya fachada principal es de sillería con arco de entrada que da paso al edificio de dos plantas y sobre la puerta tiene un pequeño escudo de la Universidad de Oviedo. Posee un jardín interior al que se accede por un arco que ostenta el escudo de Oviedo que representa la Cruz de los Ángeles. Hoy en día el edificio está ocupado por el rectorado.




