El rincón de Leodegundia

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domingo, marzo 31, 2013

Teatro y realidad


Cuando leemos una novela o vemos una obra de teatro o una película muchas veces pensamos que hay mucha fantasía y que esas cosas no suceden en la vida real, pero no es así, yo más bien diría que todo lo contrario, la ficción se suele basar en lo real.

Todos conocéis la obra de teatro "Fuenteovejuna" de Lope de Vega, cuyo tema principal es el levantamiento de un pueblo contra el Comendador que se creía con todos los derechos para abusar y conseguir lo que quería creyéndose en posición para poder hacerlo. Mataron al comendador y cuando el juez pregunta: 

¿Quién mató al comendador?
todos responden:
Fuenteovejuna, señor.

Pues bien, algo así, aunque con un final menos feliz fue lo que pasó hace muchos, muchos años y así nos los cuenta Heródoto que primero nos pone en antecedentes. 

"…nació una gran contienda y porfía acerca de los puestos y magistraturas. Autor de ella fue Arcesilao, hijo de Bato el cojo y de Feretima, el cual no quería estar a lo ordenado por Demonacte de Mantinea, sino que pretendía recobrar todas las regalías y derechos de sus antepasados. El éxito de la sedición y discordia fue, que perdida por Arcesilao la batalla hubo de escapar a Samos, y su madre a Salamina de Chipre."

"Por aquel tiempo Arcesilao, refugiado en Samos, no hacía sino reclutar a cuantos podía, con la promesa de repartirles campos en Cirene. Recogido ya un gran ejército fuese el mismo a Delfos a consultar aquel oráculo sobre su vuelta, a lo que respondió la Pythia: -"Apolo os da el reino de Cirene hasta el cuarto Bato y el cuarto Arcesilao por espacio de ocho generaciones; pero él mismo os exhorta a que no penséis en prolongarlo más allá. Vuélvete tú, y mantente tranquilo en casa; y si acaso hallares el horno lleno de cántaros no te de la gana de cocerlos, antes déjalos muy enhorabuena. Pero si cocieres la hornada, no entres en la rodeada de agua, pues de no hacerlo así morirás tú mismo, y contigo el más bravo toro"

"Este oráculo dio la Pythia a Arcesilao, quien llevando consigo las tropas que tenía en Samos, fuese a Cirene. Apoderado allí del mando, no se acordaba ya de la profecía de la Pythia, sino que procuraba vengarse de los que se le habían levantado, obligándoles a la fuga. Algunos de sus contrarios, sin querer exponerse al peligro, se habían ausentado del país; a algunos otros, caídos en manos de Arcesilao, se les envió a Chipre para que se les hiciera perecer, si bien quiso la fortuna que habiendo aportado a Cnido, los cnidios les liberasen de la muerte, y les enviasen a Tera; algunos otros, por fin, se refugiaron a una gran torre de un particular llamado Aglomaco la cual mandó rodear de fajina Arcesilao y quemar vivos en ella a dichos cireneos."

"Como reflexionase después sobre lo hecho, y entendiese que a esto aludía lo que la Pythia le decía en el oráculo, que si hallaba los cántaros en el horno no quisiese cocerlos, temiendo la muerte que se le había profetizado, e imaginando que Cirene era la rodeada de agua del oráculo, no quiso de propósito entrar más en la ciudad de los cireneos. Estaba casado con una parienta hija del rey de los barceos llamada Alacir; refugióse, pues, a la corte de su suegro. Allí, algunos de los ciudadanos, junto con aquellos cireneos que vivían en ella desterrados, habiéndoles acechado al tiempo que paseaba por la plaza, le asesinaron juntamente con su suegro."

Enterados ya de la trama de esta obra real, continuemos con el relato. Enterada su madre del asesinato se fue a Egipto para pedir ayuda para poder vengar la muerte de su hijo. Ariandes, virrey de Egipto, le proporcionó un ejército, pero antes de hacer partir el ejército, envió a Barca un  heraldo para que preguntara quien había dado muerte a Arcesilao, a lo que respondieron los barceos:

Que todos a una le habían dado la muerte por haber recibido de él muchas injurias.

Como veréis la contestación es muy similar a la de Fuenteovejuna. Claro que como ya dije, el final es bastante más desagradable que el de la obra de teatro como podréis ver a continuación. Los vengadores de Feretima pusieron sitio a Barca, y pidieron se les entregasen los autores de la muerte de Arcesilao, cosa a la que los sitiados no accedieron y después de un largo asedio con muchas muertes por ambas partes, Heródoto nos lo describe de esta manera:

"Feretima, a cuya disposición y arbitrio dejaron la ciudad, no contenta con empalar alrededor de sus muros a los barceos que mas culpables habían sido en la muerte de Arcesilao, hizo aún que cortados los pechos de sus mujeres fuesen de trecho en trecho clavados"

Como dije, a veces creemos que lo escuchado en el teatro no sucede en la vida real, pero no es así.

domingo, marzo 24, 2013

Los gatos en la pintura


Todos los que me conocen saben lo mucho que quiero y que admiro a los gatos. Son unos animales fantásticos y que desde mi punto de vista son los grandes desconocidos dentro del grupo denominado animales de compañía.

Tienen fama de antipáticos, ariscos y poco cariñosos, pero eso no es cierto, lo que pasa es que los que tratan con ellos no se molestan en conocerlos a pesar de que sus costumbres son muy rutinarias y para entenderles y llevarse bien con ellos sólo hace falta saber unas pocas cosas. Por ejemplo, que durante algunos momentos del día necesitan su espacio, o lo que es lo mismo, que nadie les moleste. Ni caricias, ni besos, ni arrumacos y si alguien no entiende este mensaje es posible que reciba un zarpazo, pero no porque el gato sea antipático, sino porque la persona ocupó su espacio sin permiso y fuera de hora. Si tú los respetas, ellos te respetan. ¿Qué no son cariñosos? lo son, en cuanto te sientas en un sillón o te echas en el sofá, no tarda en venir el gato de turno a tomar posición a tu lado, cuando no encima, y se encoge convirtiéndose en un ovillo buscando tu calor. Y le gustan las caricias, y los mimos, y las bromas, pero todo en su momento, momento que por supuesto él decide cuando es.

Pero este no es el tema de hoy, el tema es el gato en el arte. A mí siempre me pareció que los perros eran los más retratados y aunque no me molesta que se retrate a los perros, sentía un poco de resquemor porque los gatos lo fueran menos. Pero una buena amiga me regaló un día un libro titulado "Gatos en el arte" de Stefano Zuffi que me mostró la gran cantidad de veces que los gatos forman parte de los cuadros sin ser ellos los protagonistas, pero allí están, mas o menos a la vista, y que en muchas ocasiones pasan desapercibidos.

Por ejemplo ¿quién reparó en el gato que hay en el cuadro titulado "El rey bebe" pintado por David Teniers, El joven? posiblemente muy pocos, la escena de gente alegre que celebra la fiesta del Rey Haba que consiste en que al final de la comida se servía un bizcocho en cuyo interior estaba escondida un haba y a quien la encontrara se le proclamaba rey de la fiesta se lleva todas las miradas, pero bajo la silla del rey hay un gatín escondido que tal vez esté vigilando al perro que parece participar en el jolgorio.

David Teniers, el joven (1610-1690)

Y en un cuadro que seguro visteis un montón de veces, como es el cuadro de "Las hilanderas" de Velázquez, ¿alguno de vosotros reparó en el gato que se está quedando dormido al pie de una de las hilanderas? seguro que vuestros ojos se fueron al fondo del cuadro que está bañado de luz y le proporciona profundidad o fuisteis recorriendo las figuras que mas o menos iluminadas nos muestran la actividad de la sala, sólo el gato a pesar de estar presente no forma parte de ella inmerso como está en su mundo.

Diego Velázquez (1599-1660)

Pero también hay multitud de cuadros en los que los gatos son los protagonistas retratados con más o menos acierto, algunos son gatos reales, vivos, otros sin embargo son gatos imaginarios y extraños pero que aún así no pierden su encanto que radica principalmente en sus enigmáticas miradas. Veamos una muestra:

Podemos empezar por este gatín tan entrañable que desprende ternura

George Stubbs (1724-1806)

también hay quien representa a los gatos con un estilo moderno e incluso irreal, pero que no dejan de tener su encanto

Lilian Zampol (1963- )


Alex Sala Machuca

Pero si hay alguien que sabe retratar a los gatos ese es sin duda Antonio Guzmán Capel. Sus gatos tienen vida y muestran los estados de ánimo por los que pasan a lo largo del día.

En este cuadro podemos ver dos preciosos gatinos, mientras uno asoma con mirada expectante, el roxín permanece indolente distraído con algo que nosotros no alcanzamos a ver.


Una madre con su hija, ambas se sienten tranquilas, la pequeña se sabe protegida y su madre nos mira fijamente pero sin miedo.


Les encanta acomodarse en las ventanas, buen lugar para ver lo que les rodea, tomar el sol, o sentirse protegidos. Pero su actitud no es siempre la misma, unas veces se les ve relajados


mientras que otras, atentos a algo que se mueve frente a ellos, están a punto de saltar.


Muchas veces cuando se enfrentan a personas desconocidas se quedan quietos esperando su reacción para decidir cual va a ser la suya.


Enternece ver a una gata con sus crías recién nacidas que apenas se dejan ver. Su mirada nos comunica el momento por el que está pasando mezcla de felicidad y preocupación.


Y es una gata la que nos despide clavando en nosotros esa mirada enigmática, limpia, con la que quiere conocernos y que la conozcamos a ella, una comunicación sin palabras pero intensa.


Si, los gatos de Capel están vivos y desde aquí le felicito por retratarlos no sólo físicamente, sino también en sus distintos estados de ánimo, lo que podrá servir para que la gente conozca mejor a estos grandes desconocidos a pesar de su cercanía. 

domingo, marzo 17, 2013

Guerras y más guerras


Que yo diga que el mundo está hecho a base de guerras no creo que sorprenda a nadie ya que toda la historia de la humanidad es una sucesión de ellas en las que sólo varía el número de contendientes, las armas utilizadas, el lugar en donde se llevan a cabo y la duración de las mismas. En cuanto a los motivos aparentemente son variados, se declaran guerras religiosas, de poder, económicas, ideológicas, de conquista…… y otros muchos mas aunque en el fondo creo que el principal motivo es la ambición de algunas personas, su deseo de conseguir poder, riqueza o fama y para lo cual no reparan ni en gastos materiales ni en vidas humanas.

¿Pero los que propician las guerras salen siempre victoriosos? pues no siempre porque hacer una guerra se puede decir que es un arte y en el arte no valen las chapuzas.

Algunos aprenden algunas cosas en la primera derrota sufrida y procuran que cuando inician otra no se comentan los mismos errores, pero no es sólo un detalle el que hay que tener en cuenta, en realidad son muchos. Vamos con un ejemplo. En el año 333 a.C. persas y macedonios se enfrentaron en Issos. Darío III con un gran ejército se enfrenta a Alejandro Magno librándose una gran batalla, lo que llevó a la derrota a Darío no fue que su ejército fuera menor que el de Alejandro, que no lo era, en realidad le superaba en número con una gran diferencia, lo que no tuvo en cuenta fue el lugar elegido, un llano estrecho entre las montañas y el mar lo que le impidió emplear a todo su ejército.

Cuando en el año 331 a.C. se enfrenta de nuevo a Alejandro Magno, lo primero que hizo fue ofrecerle un soborno para lograr la paz, supongo que no se le había olvidado su derrota anterior, pero Alejandro no lo aceptó, el quería luchar. Se dice que Parmenión, uno de sus generales, le aconsejó que aceptara la oferta diciéndole "si yo estuviera en tu lugar, aceptaría" a lo que le contestó Alejandro "Yo también lo aceptaría si fuese tú", o lo que es lo mismo "cierra el pico".

No hubo acuerdo y se empezó a preparar la contienda. Quizás lo primero que recordó Darío de su batalla y derrota anterior, fue la mala elección del lugar en donde se debía de llevar a cabo el enfrentamiento, en Issos era poco espacio para su numeroso ejército, así que esta vez eligió el lugar poniendo la máxima atención, decidiéndose al final por una extensa llanura, Gaugamela y allí desplegó su gran ejército que dicen que estaba formado por casi un cuarto de millón de hombres. Enfrente el ejército de Alejandro, 7.000 jinetes y 40.000 de infantería.

Aparentemente, vistos los ejércitos enfrentados la victoria tendría que inclinarse a la parte de Darío, pero no fue así, por eso dije antes que son muchas las cosas a tener en cuenta cuando se decide presentar batalla. Imprescindible es tener un buen estratega, no basta que los soldados sean muchos ya que si no están bien entrenados, si no son disciplinados, ni están bien armados, la derrota está asegurada.

Mientras que los soldados de Darío no estaban bien armados ni bien entrenados, los de Alejandro si lo estaban, eran luchadores veteranos vencedores en muchas luchas y poseían una gran disciplina. Una de las armas que utilizaban los soldados macedonios eran unas picas larguísimas que cuando se bajaban formaban ante el enemigo una barrera difícil de sortear, pero para que esta arma fuera efectiva era necesario que se mantuviera la formación, si esta se rompía serían derrotados.


Cuando a primera hora de la tarde llegaron los macedonios al campo de batalla se encontraron enfrente al gran ejército persa que estaba en formación ocupando varios kilómetros a lo largo de la llanura. Alejandro quería entrar en batalla de inmediato, pero Parmenión que era más sensato le aconsejó que esperase, decisión muy acertada pues así les dio tiempo a reconocer el terreno y descubrir las posibilidades de movimiento del enemigo. Hubo división de opiniones también en si atacar por la noche y nuevo acierto en no hacerlo porque eso obligó a Darío a mantener en alerta a sus tropas mientras que las de Alejandro aprovecharon para descansar, otro dato que hay que tener en cuenta pues no se lucha igual después de un descanso que después de muchas horas de vigilia.

Llegada la hora Alejandro atacó de una forma no habitual ya que en lugar de hacerlo de frente lo hizo de de forma oblicua y hacia la izquierda de los persas que no se esperaban esta maniobra lo que obligó a Darío a mover su ejército hacia ese lado y por otro lado los macedonios habían descubierto los caminos preparados para los carros de los persas, los famosos carros equipados con guadañas que eran la sorpresa que había preparado Darío. Al ser descubiertos, los arqueros y lanceros de Alejandro detuvieron a los carros.


Lo que empezó siendo una batalla mas o menos organizada acabó convertida en una lucha caótica. La caballería levantó tanto polvo que acabó por cegar a los combatientes, los que tenían que poner orden ni veían el conjunto ni eran escuchados, Alejandro no pensaba mas que en alcanzar a Darío y Darío se encontró con un ejército descontrolado por inexperto y aunque luchó desde su carro lanzando jabalinas a diestro y siniestro, una jabalina lanzada por Alejando con intención de alcanzarle falló por poco y le dio al auriga que iba detrás del rey. Los que estaban cerca gritaron al ver la escena y los que estaban mas lejos interpretaron que el que había caído era el rey y no esperaron a comprobar nada, salieron huyendo pensando en eso de "sálvese quien pueda". El rey viendo ese desastre, rodeado de enemigos y con los suyos en plena huida y decidió dar también el media vuelta.


Alejandro entonces que ya estaba metido en faena emprendió una brutal persecución asesinando a todo persa que alcanzaba con la idea eso si, de matar a Darío, pero Bussus, general del ejército persa se le había adelantado asesinándolo, lo que indica que entre el ejército persa había desavenencias.

En resumen, esta batalla que en realidad no sirvió para nada se saldó según los datos que llegaron hasta nosotros con más de 35.000 muertos. Quizás si las cosas las hubieran hecho bien la batalla seguiría sin servir para nada pero las muertes serían muchas menos. Lo que nos lleva a que no deberían de existir las guerras ya que solo producen muerte y destrucción, pero ya que parecen ser inevitables, al menos hacerlas bien.

domingo, marzo 10, 2013

¿Cómo serían?


Dicen que el diablo cuando no tiene nada que hacer con el rabo espanta las moscas, y algo así nos pasa a nosotros cuando en medio de las tareas cotidianas decidimos tomarnos un respiro y dejamos que nuestra imaginación se lance a divagar partiendo de una idea o una imagen que surge de pronto.

Eso me sucedió a mi que cansada de bailar con la escoba y bregar en la cocina con cacerolas e ingredientes, decidí tomarme un respiro hojeando un libro de arte. En el encontré un cuadro de Adriaen van der Werff que representaba a Adan y Eva en el paraíso, desnudos ambos, como se supone que tenían que estar, con buen tipo y los cuerpos sin pelo superfluo alguno y ella a punto de comerse la dichosa manzana que tantos problemas les traerían y de los cuales todavía nosotros estamos participando.

Este es el cuadro


Recordé haber visto más cuadros de otros famosos pintores y los busqué para comprobar las diferencias que existían entre las interpretaciones de unos y otros. No eran muchas en los que encontré. La pareja siempre luce buen tipo, Adán con un color de piel más bronceado que Eva que parece que huiría del sol del paraíso, ausencia de vello en el cuerpo, prácticamente desnudos y eso si, no faltan ni el manzano, ni sus frutos que son los causantes de tantos problemas, ni la perversa y tentadora serpiente.

Durero nos ofrece esta obra


pintados en dos tablas, por lo que las figuras van por separado y sobre fondo oscuro para que la vista recaiga sobre ellas sin distracciones.

Lucas Cranach parece que quiera resaltar el momento en que Eva quiere convencer a Adán de que coma la manzana, se la ofrece con la mano derecha mientras le lanza una mirada retadora y en su mano izquierda y como escondiéndola se guarda otra para ella. Aunque Adán por mucho que diga que fue Eva la que le dio a comer la manzana parece por este cuadro que él ya tenía pensado comerse una que porta en la mano derecha.


curiosamente en estos dos últimos cuadros, a pesar de no haberse comido la manzana todavía, ya se muestran muy recatados cubriéndose con las hojas del manzano.

Tiziano y Rubens pintaron dos cuadros muy parecidos aunque no iguales.

En ambos se ve a Adán sentado y con el brazo izquierdo levantado como queriendo impedir que Eva coja la manzana, cosa que no logra pues ella ya le echó mano, pero hay una diferencia evidente y es en la vestimenta, por decirlo de alguna manera. Mientras Tiziano tapa pudorosamente a Eva con una rama que sale de detrás del árbol, Adán está bien provisto de unas hojas de parra, lo que me hace preguntarme ¿lo de taparse con las hojas de parra no fue por la vergüenza que sintieron después de pecar? si es así y ya habían pecado ¿es que Eva no escarmentó y se empeñó en comer mas? así nos va a todos con tanta manzana.


Sin embargo en el cuadro de Rubens a Eva, quizás por casualidad, la rama le cayó justo delante de donde debía, pero Adán está en porrica total y eso si, como suele ser costumbre en Rubens ambas figuras lucen un poco de celulitis.


Y fue entonces cuando mis pensamientos volaron hasta otro sitio, la evolución humana, y de pronto me encontré con que las figuras representadas en estos cuadros nada tenían que ver con las que según esta evolución se supone corresponderían al primer hombre y la primera mujer.

Si hacemos caso a algunos estudios, los primeros homínidos fueron los australopithecus y 
según este dibujo que encontré en Internet así fue evolucionando


por lo que si Adán y Eva fueron los primeros, su aspecto debía de parecerse mas a estos que os muestro ahora que a los que nos regalaron esos famosos pintores


Tienen razón en decir lo del diablo y las moscas, mira en que fui a perder el tiempo, mejor será que vuelva a la escoba y las cacerolas.

domingo, marzo 03, 2013

Juguemos


Estos últimos días sufrimos las temperaturas mas bajas de todo el invierno y creo que sería agradable reunirse con los amigos para pasar un momento entretenido y mientras nos tomamos unas copichuelas de licores caseros sentados alrededor de la chimenea, podemos jugar a las adivinanzas, juego que en otros tiempos era bastante habitual pero que ahora parece que esté obsoleto.

Os propongo que empiece yo poniéndoos unas cuantas adivinanzas numeradas para que vosotros deis la solución si la sabéis y luego vosotros pongáis alguna también para que todos intentemos adivinarla, de esa forma participaríamos todos. En caso de que no os apetezca participar, al final de la semana yo pondría las soluciones de las que publico.

Empecemos, primero sentaros cómodamente ceca del fuego


y tomad una copa para entonaros un poco


Y allá van las adivinanzas.


(1)
Yo soy el diminutivo
de una fruta muy hermosa,
tengo virtud provechosa,
en el campo siempre vivo 
y mi cabeza es vistosa.
(2)
Adivina quien yo soy:
al ir parece que vengo,
y al venir, es que me voy.
(3)
Mi nombre es de peregrino
y tengo virtud notable,
me encuentras en los caminos
y mi olor es agradable.
(4)
Ordenes da, órdenes recibe,
algunas autoriza, otras prohíbe.
(5)
En un huerto no muy llano
hay dos cristalinas fuentes,
no está a gusto el hortelano
cuando crecen las corrientes.
6)
¿Quién pensaréis que yo soy,
que cuanto más y más lavo
mucho más sucia me voy?
(7)
Si lo ves, es invierno; 
si lo guardas, pereces; 
cada día lo tomas
mas de mil veces.


Bien, ahora os toca a vosotros ¿quién se anima?